La Comunicación Familiar

No siempre es fácil tener una buena comunicación con nuestros hijos, cada día hay menos tiempo para compartir y dialogar en familia; sin embargo pese al escaso tiempo con que contamos, es necesario y posible aprender estilos adecuados de comunicación con ellos, los que pueden servirnos para saber lo que piensan, conocer sus inquietudes, hacerles saber que pueden confiar y contar con nosotros.

Una buena comunicación con nuestros hijos contribuye a lograr mejores relaciones al interior de la familia, estimula la confianza mutua y nos facilita como padres la labor formadora; al abrir y mantener abierto con ellos un canal de comunicación, podemos compartir valores, ideas y proyectos, facilita el desarrollo de un clima familiar positivo, así como también promueve la resolución de conflictos familiares.

Trabajo en equipo:

Observa el video en familia

Después de observar el video, los miembros de la familia socializaran y responderán las siguientes preguntas:

- ¿De que trata el video?

- ¿Que importancia tiene la temática tratada en el video? 

- ¿Que relación tiene con el diario vivir de la familia?

Lectura: " La Buena Comunicación Familiar".

Una buena comunicación en familia permite que exista una mayor comprensión de las diversas personalidades y necesidades de sus integrantes, por lo que cada persona es apreciada y aceptada de acuerdo a como es.

Habilidades para una buena comunicación:

• Escuchar: Saber escuchar es lo mas importante de una buena comunicación y tal vez lo más difícil; y para ello:

- Prestemos atención, dejemos de hacer otras cosas y escuchemos lo que nos dicen.

- No interrumpamos cuando nos hablan.

- Pensemos la situación desde el lugar del otro (empatía).

- No enjuiciemos ni seamos prejuiciosos (no supongamos cosas).

- Verifiquemos con el otro, si lo que entendimos esta correcto.

• Observar: En las conversaciones, la comunicación verbal es tan importante como la no verbal; y para ello:

- Fijémonos en el lenguaje corporal, es decir, la expresión facial del otro y su tono al hablar.

- Durante la conversación, demostremos interés en lo que nos dicen, por ejemplo mirando a los ojos.

- Manifestemos una actitud atenta y respetuosa, fijándonos en nuestra propia postura.

• Responder: Si deseamos que nuestros hijos compartan sus sentimientos, opiniones, dudas o temores con nosotros, debemos aprender a acogerlos en forma cálida y asertiva; y para ello:

- Manifestemos nuestro afecto con el cuerpo: si es el caso, sonriamos, mirémoslo, tomémoslo de la mano y ocupemos un tono cálido y suave.

- Para no generar confusión, examinemos si somos coherentes entre lo "que sentimos" nuestra postura y nuestros gestos.

- Utilicemos frases que abran la comunicación, como "cuéntame más..."; "dime, te escucho..."; "quieres decir algo más...".

- Respondamos con frases como: "Me preocupa mucho que..."; "entiendo que te sientas así..."; "me interesa lo que me dices porque...".

- Tratemos de entender lo que hay detrás del comportamiento de nuestros hijos.

• Además:

- No demos consejos cada vez que hablemos con ellos, muchas veces solo quieren ser escuchados; primero tratemos de entender y de ponernos en el lugar del otro.

- Evitemos hacer comparaciones, recriminaciones y usar palabras hirientes y despectivas cuando hablemos con nuestros hijos.

- Dediquemos tiempo a estar junto a nuestra familia, haciendo actividades con ellos en casa.

- Aportemos ideas y propongamos actividades entre todos para escoger lo que mas nos guste.

- Sigamos la regla de "lo que se dice se cumple". No permitamos que se cree la sensación de que "da lo mismo" que se propongan actividades porque finalmente "nunca" se hace nada.

- Expresemos nuestros sentimientos, temores, dudas y opiniones, y permitámosles a nuestros hijos compartir las suyas.

- Busquemos algún momento del día o de la semana para conversar de aquellos temas que les interesan y preocupan. Es importante tener en cuenta que los hijos no siempre buscan un consejo o recomendación; pongámonos en su lugar, dejémoslos y escuchémoslos demostrando que entendemos lo que dicen.

Para recordar...

"La Familia puede ser una escuela de comunicación como bendición".

Francisco I

Taller: ¿Sabemos comunicarnos? 

Trabajo en equipo:

La familia se divide en dos equipos, los hijos se reúnen y elaboran en un cartel el símbolo o logo que represente la familia y la comunicación; y los padres se dedican a responder los siguientes interrogantes de forma individual:

- Tres dificultades que tiene para dialogar con su esposo(a).

- Tres dificultades que tiene para dialogar con sus hijos.

- Tres condiciones para comunicarse sinceramente con su esposo(a).

- Tres condiciones para comunicarse sinceramente con sus hijos.

Socialización:

Terminada la actividad, uno de los hijos hace la explicación del símbolo o logo que representa a la familia y la comunicación, y los padres realizan la socialización de las respuestas a los cuatro interrogantes.

Reflexión:

De acuerdo con la lectura, el vídeo y la actividad anterior responda las siguientes preguntas:

- ¿Que condiciones se requieren para el dialogo?

- ¿Que barreras impiden la comunicación?

- ¿Por qué es importante el dialogo familiar?

- ¿Cómo podemos ayudar a nuestros hijos en fortalecer la comunicación?

Compromiso:

- ¿Que cambios debo realizar de aquí en adelante, con el animo de mejorar la comunicación familiar?

Construcción de evidencia:

Cada estudiante con sus padres o acudientes, desarrollara una cartelera, de los resultados de la actividad en equipo y de la socialización y reflexión; tomara un registro fotográfico de la evidencia y enviara vía Whatsapp o correo electrónico.

Evaluación: (Exclusivo para padres)

- ¿Que aprendí?
- ¿Cómo me sentí desarrollando este taller al lado de mi familia?

Para reflexionar... Observa el video y responde:

- ¿Que puedo concluir de la temática "La Comunicación Familiar"?

"Quizás no tenga todas las cosas materiales que deseo, pero tengo el tesoro mas grande del mundo: MI FAMILIA"